La Responsabilidad del Fabricante de Productos Alimenticios en mal Estado

Industria Alimentaria ha alcanzado un enorme grado de complejidad en nuestros días, comercializando a diario nuevos productos que son el resultado de complicados procesos de transformación altamente automatizados y que utilizan en muchos casos compuestos químicos en los mismos.
Por esta causa, son cada vez mayores los riesgos que asumimos a la hora de consumir alimentos y bebidas. Cualquier fallo en el proceso podría resultar fatal para nuestra salud y bienestar, determinando la responsabilidad del fabricante de dichos productos por los daños que pudieran sernos ocasionados.
En efecto, todo consumidor goza de una protección genérica frente a los perjuicios, personales o patrimoniales, que le pudieran ocasionar los productos defectuosos de todo tipo que pudiera emplear o, en este caso concreto, ingerir. Ello le permitiría interponer una Reclamación contra la Compañía que hubiera fabricado o distribuido el alimento o bebida que le ocasionó sus daños.
En un caso real, una señora sufrió un daño en su dentadura al morder una aceituna con hueso que se encontraba en un envase en cuyo etiquetado se especificaba que las aceitunas contenidas en el mismo no tenían hueso; otorgándole el Juez una compensación por ese perjuicio sufrido.
En particular, los casos de Salmonelosis
Uno de los supuestos más frecuentes en este tipo de situaciones consiste en el consumo de productos alimenticios derivados del huevo (por ejemplo la tortilla o la ensaladilla rusa), dando lugar intoxicaciones por salmonella. Éstos podrían ocurrir tanto con la compra de los mismos en establecimientos o superficies comerciales como en restaurantes o centros hosteleros.
Así, si por ejemplo sufrieras una intoxicación de este tipo en tus vacaciones podría serte otorgada una indemnización tanto por los gastos sufridos, por ejemplo por tener que interrumpir las vacaciones (perdiendo así el valor de la reserva hotelera y, en su caso, cancelar billetes de avión ya adquiridos), la reducción de ingresos si tuvieras que perder días de trabajo y, por último, una suma adicional en concepto de perjuicios morales por haber perdido de esa forma tu periodo de descanso vacacional.
¿Cómo se alcanza una solución en este tipo de casos?
Es poco frecuente en la práctica que este tipo de casos lleguen ante los Tribunales. A fin de cuentas, la Industria Alimentaria deposita gran parte de su valor en su imagen pública, que podría quedar muy afectada ante un caso que quedara enquistado ante los Tribunales, motivo por el cual suelen ofrecerse acuerdos extrajudiciales que permitan una solución rápida al conflicto.
En cualquiera de los casos, sería conveniente que contaras con la asistencia de un abogado especialista que pudiera valorar si la compensación que se te ofrece es justa, o si sería más oportuno rechazarla y llevar la cuestión ante la Justicia.